Se veía una tranquila noche donde a ella la esperaba pero no la recuerdo bien solo su cabello oscuro y piel clara algo delgada cuando me dijo algo pero no recuerdo luego subo la azotea en obra gris y lo veo no era un duende como lo pensaba si no es un gnomo de edad quien sonriendo desenvainó su espadin y al instante tenía también una igual y sin dudar peleamos pero su espada salió al aire y la tomé y quedó desarmado al instante pensé dale en el pecho y terminalo pero sonreí, se la pase tomandola por la punta continuando pero esta vez el tomo la mía, sonrió me la arrojo sonriendo regresando la amabilidad y se retiró con un gesto bajando su sombrero al despertar aún era de noche.
